Una evolución moderada mostró Chile este año en el ranking “Paying Taxes”, realizado conjuntamente por el Banco Mundial y PwC, arista que deriva del Doing Business. Esta compara cuán fácil es para una empresa pagar sus impuestos y realizar cumplimiento tributario en las distintas economías comprendidas en el estudio.
Si bien Chile evoluciona este año y pasa del puesto 120 al 72 en el listado -de un total de 190 países-, está lejos del lugar 33 que ocupaba hasta 2015. El deterioro inicial se produjo el año pasado por dos ítems específicos de procesos posteriores al cumplimiento tributario: el plazo para devolución del IVA por activos fijos y la demora de Servicio de Impuestos Internos (SII) cuando se solicitan rectificaciones en declaraciones de impuestos. El primer punto aún no se soluciona: existe un proyecto en trámite en el Congreso para acotar los tiempos, pero aún no ha sido aprobado. El segundo punto se considera más solucionado, porque sí hubo mejoras en las respuestas de las autoridades tributarias. “En esta edición, la variable que sufrió una mejora considerable fue la de procesos posdeclaración, lo que se podría explicar por la percepción de que el SII habría mejorado sus tiempos de respuesta en la corrección de errores de declaraciones y conclusión de fiscalizaciones de impuesto a la renta”, dice Rodrigo Hernández, socio del área legal y tributaria de PwC Chile.
“Sin perjuicio de lo anterior, será relevante observar cómo afectará a la posición de Chile, en las próximas ediciones de este estudio, la sostenida alza del impuesto de primera categoría por la reforma tributaria y las nuevas obligaciones – especialmente de declaraciones juradas- que se han agregado recientemente”, acota.
El experto también añade que Chile puede mostrar deterioros futuros en el ranking dado que las mediciones actuales aún no incorporaron la baja de impuestos que anunciaron varios países en el mundo como Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Argentina, etc.
La evolución de los indicadores en Chile en el último año
Las variables consideradas para los efectos de este estudio y los puntajes obtenidos por Chile los dos últimos años son los siguientes:
Tasa total de impuestos y contribuciones: corresponde al costo de los impuestos soportados (impuesto a la renta, IVA y seguridad social), calculados como un porcentaje respecto de la utilidad comercial. El país pasó de tener un puntaje 30,5 a 33.
Tiempo dedicado al cumplimiento: Este indicador se refiere al tiempo que se requiere para preparar las declaraciones de impuestos requeridas en la jurisdicción. En este caso se mantuvo, con 291 “horas para cumplir”.
Impuestos pagados: se refiere a la cantidad de tipos de impuestos que debieron pagarse dentro del año. Hace varias mediciones Chile marca el mismo número: Siete.
Procesos posdeclaración: Este corresponde al tiempo que toman los procesos posteriores a la declaración de un impuesto, y fue considerado por primera vez el año pasado. Específicamente, para calcular este parámetro se toma en cuenta los procesos de devolución de IVA y corrección de declaraciones de impuesto a la renta, considerándose el tiempo que se requiere para reclamar una devolución de IVA o para la rectificación del impuesto a la renta, asumiendo la pertinente revisión o fiscalización de la autoridad tributaria hasta su conclusión. El año pasado Chile marcó solo 5,58 puntos -de un máximo de 100- y este año evolucionó a 58,4.
Artículo de María Penaforte
Fuente: Economía y Negocios